09 de Junio de 2009

La víctima, de 33 años, era director y docente de una escuela en esa ciudad. La Policía lo encontró muerto de un balazo en el abdomen. Descartaron un intento de robo e investigan el móvil pasional.

Un hombre de 33 años, docente y director de una escuela en la ciudad Bonaerense de General Rodríguez, murió esta mañana de un balazo en el abdomen, tras ser hallado por la Policía en el living de su casa, ubicada en la calle Espora al 600 de esa localidad. Los investigadores descartaron un intento de robo, y se inclinan por el móvil pasional. Según el testimonio de vecinos, la víctima, identificada como Hernán Guillermo Bernal, mantenía una relación homosexual. Por otra parte, la Policía encontró en el teléfono celular de Bernal una serie de mensajes de texto que había intercambiado con otro hombre, que ahora sería el principal sospechoso del homicidio. El docente fue encontrado en el living de su casa. Había recibido un balazo en el abdomen y además tenía heridas en el rostro. La Policía lo encontró aún con vida y lo trasladaron en una ambulancia de Bomberos a un hospital de la zona, donde finalmente murió. En el lugar del hecho, los peritos lograron hallar un plomo calibre 32. En la casa no había faltantes de dinero ni objetos de valor. Tampoco había signos de violencia ni ingresos forzados, por lo cual la sospecha se inclina por el móvil pasional y la posibilidad de que el hombre que le disparó a Bernal fuera un conocido. 

La Policía tiene en su poder el apodo y el número de teléfono de un hombre que había enviados mensajes a la víctima poco antes de descubrirse el hecho. Intervienen la comisaría 2 de General Rodriguez y la UFI 14 de Mercedes, a cargo del fiscal Leandro Marquiegui.

Por su parte, la familia del profesor atribuyó el crimen a una presunta venganza, porque Bernal habría denunciado la venta de drogas en la escuela donde trabajaba. Pero la Policía apunta a la hipótesis pasional, y además los investigadores destacaron que Bernal no había presentado ninguna denuncia, según indicaron fuentes citadas por DyN.

Anoche, la víctima había estado en la casa de su madre y regresó a su vivienda cerca de la medianoche. Antes de llegar, intercambió mensajes con un hombre al que le avisaba que estaba llegando. "No hubo ningún testigo directo de la agresión, sólo aquellos que estaban cuando la víctima pidió auxilio. En la casa había un cierto desorden, pero no faltaba nada. El robo fue descartado de entrada", dijo la Policía.